Sindrome de la Impostora en "Mujeres emprendoras"



El  Sindrome de la impostora en mujeres emprendedoras.

En ocasiones, los desafíos que enfrentamos como emprendedoras pueden bloquear nuestro potencial. Esto se conoce como el "Sindrome de la impostora", una condición psicológica que afecta a muchas mujeres y hombres, especialmente cuando se enfrentan a desafíos como emprender. Siendo el índice de prevalencia más alto en mujeres que en hombres. 

De aquí que mi artículo sea para ellas sin dejar de lado la figura masculina.

¿Qué es el Síndrome de la Impostora?

El término "síndrome de la impostora" fue acuñado por las psicólogas Pauline Clance y Suzanne Imes en 1978. Las mujeres que lo padecen tienen a una percepción distorsionada de las propias habilidades, donde, a pesar de sus logros evidentes, sienten que no son lo suficientemente competentes y atribuyen su éxito a factores externos como la suerte o la ayuda de otros.

Esta condición se caracteriza por la sensación persistente de no merecer el éxito alcanzado y el temor constante a ser descubiertas como un "fraude".

¿Cómo mo puede manifestarse el Síndrome de la Impostora en el Emprendimiento?


Para las mujeres que deciden emprender, el síndrome de la impostora puede manifestarse de varias maneras:


1. Duda constante: Las emprendedoras constantemente pueden cuestionar sus decisiones y capacidades, sintiendo que no están a la altura del reto de dirigir un negocio.

2. Perfeccionismo: La búsqueda de la perfección puede ser una trampa. Las emprendedoras pueden sentirse incapaces de lanzar un producto o servicio hasta que esté "perfecto", retrasando así su progreso.

3. Miedo al fracaso: El temor a fallar puede paralizar a las emprendedoras, impidiéndoles tomar riesgos necesarios para el crecimiento de su negocio.

4. Auto-sabotaje: Algunas emprendedoras pueden evitar oportunidades de crecimiento o rechazar elogios y reconocimientos, sintiendo que no los merecen.

¿Cómo podemos superar el Síndrome del Impostor?


Superar el síndrome de la impostora no es fácil, pero es posible con estrategias adecuadas:


1. Reconocer el problema: El primer paso es reconocer que estas dudas y miedos son síntomas del síndrome de la impostora y no reflejan la realidad. No tengas miedo a ello ya que te ayudará como punto de partida a alcanzar tu objetivo. 

2. Buscar apoyo: Formar una red de apoyo con otros emprendedores y mentores puede proporcionar una perspectiva externa y aliento necesario para avanzar. Est apoyo es importante para crear ese vínculo de confianza hacia una misma.

3. Celebrar logros: Es crucial tomarse el tiempo para reconocer y celebrar los propios éxitos, por pequeños que sean, para reforzar la confianza en las propias capacidades.

4. Aceptar la imperfección: Entender que el fracaso y los errores son parte del proceso de aprendizaje puede ayudar a reducir el miedo y la presión autoimpuesta.

5. Practicar la auto-compasión: Ser amable y comprensiva con una misma, permitiéndose errores y fracasos, es vital para mantener una salud mental positiva.

No dejemos que el síndrome de la impostora puede sea un obstáculo significativo para nosotras,  mujeres emprendedoras. Es totalmente superable. 

Reconoce este síndrome y trabaja activamente para combatirlo. De esta forma podras avanzar con mayor confianza y éxito en tus proyectos inspirando a otras a hacer lo mismo. 


Ángeles García 
Emprendedora de mi propia vida. 
Coach motivacional y educativo.


Si necesitas más información puedes contactar a través de mail ag.emprendetuvida@gmail.com 

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